Moskva (Moscú) es el nombre elegido por la colonia rusa en España para entrar en el sector de la restauración. Desde la empresa Barcelona Rusa, que coordina el turismo y los negocios rusos en nuestro país –unos 700.000 rusos residen en España, a los que se suman los casi 500.000 turistas anuales-, con la gestión propia de una inmobiliaria, una constructora y un tour operador cien por cien ruso, se implantan ahora en la hostelería con un concepto integral de ocio y gastronomía.
El primer restaurante, abierto el pasado junio en la céntrica Gran Vía barcelonesa –a la altura de la Universidad de Barcelona- servirá de prototipo para lanzar una cadena de restaurantes por las principales capitales españolas –principales para los negocios y turismo rusos, es decir, Madrid, Marbella, Alicante, incluso Lloret de Mar, en Barcelona-, e incluso, no descartan crear una franquicia para un mayor crecimiento y expansión por la geografía nacional.
Moskva es un local pensado para el cliente ruso, con una oferta gastronómica rusa al cien por cien, prensa y libros en lengua rusa y canales de televisión también rusos. “Queremos que sea algo más que un restaurante, una especie de club social y cultural, por eso en la planta baja creamos una zona de ocio, de relax, con sauna rusa y zona de restauración de lujo, muy exclusiva, para que nuestros clientes pasen una verdadera jornada rusa, es decir, puedan estar desde la mañana a la noche sin salir del local, relajándose, conversando y comiendo”, cuenta Alexander Chufarovskiy, responsable de Barcelona Rusa, y por tanto, del restaurante Moskva. Se trata del lujo y la ostentación rusa en su máxima expresión, pero enclavado en el corazón del barrio comercial, turístico (de mochila, no de lujo) y estudiantil de Barcelona.
Por lo que respecta a la oferta gastronómica, Moskva apuesta en su primera planta, a pie de calle, por especialidades de cocina rusa de fácil elaboración: pasteles, hojaldres, crepes, ensaladilla, etcétera; mientras que en la zona exclusiva o “vip”, como le gusta remarcar a Alexander Chufarovskiy, se ofrecerán especialidades basadas en productos de lujo: caviar, pescados nórdicos, y otros manjares de su país. La cocina del establecimiento está dirigida, sin embargo, por un cocinero de origen italiano, Marco Farazo, quien tras una inmersión en la cultura y gastronomía rusa y de los países de la ex URSS, ha diseñado la carta del Moskva.
“Nuestro principal objetivo es mostrar una idea diferente de lo ruso, promocionar nuestra cultura y nuestra cocina a los españoles, y acoger a los turistas y residentes de origen ruso, para que se sientan como en casa”, añade Alexander Chufarovskiy. Cabe destacar, asimismo, que Barcelona Rusa colabora directamente con la embajada y el consulado ruso, por lo que clientes y promoción no les faltan. l I.Gayán