Julieta, nace de la mano de Antonio Martuscelli y Roberto Stella, dos amigos y empresarios hosteleros italianos afincados desde hace años en Madrid, en el que definen como su proyecto más personal.
Se trata de un restaurante de corte informal que nace con la filosofía de fusionar los sabores de la gastronomía italiana y de su Nápoles natal con los de la cocina española de siempre.
Un objetivo que han conseguido en un coqueto espacio situado en uno de los barrios más modernos y castizos de la capital, con una propuesta gastronómica pensada para disfrutar a cualquier hora del día y sustentada en la sencillez y en una cuidada selección de productos. Y es que los dos socios napolitanos se han apoyado en pequeños productores que conocen a la perfección para traer a este pequeño local los mejores productos de las despensas transalpina y española. Una meticulosa selección que da como resultado platos sencillos y originales con sabores auténticos.
Con horario non stop, Julieta arranca el día con el desayuno y cierra sus puertas tras las primeras copas o cócteles de la noche. Un lugar con un punto canalla e informal gracias a una decoración sencilla en la que se han cuidado todos los detalles: desde las mesas de madera de inspiración rústica y las sillas en tonos blancos y azules hasta pequeños elementos como las flores frescas, las estanterías y los espejos que se pueden encontrar en el local.
