
La evolución del sector de la restauración cambia día a día, tanto como lo hace la tecnología. Es un sector en transformación constante, que necesita de respuestas inmediatas y de innovación como eje principal.
Mª José Michavila, directora general de Casual Brands/ Taco Bell España
En los años 80 llegaron marcas de restauración americana que ya son consideradas como propias de la cultura española. Nos hemos adaptado a pedir en barra, comer rápido y recoger antes de abandonar el establecimiento. A veces no nos damos cuenta de la hora en la que consumimos porque nos hemos acostumbrados a que nos ofrezcan comida en cualquier momento del día con un horario ininterrumpido. Ya no nos sorprende ver a personas mayores comer con sus manos en la cadena de restauración de moda.
Nos parece habitual llegar a un restaurante y pedir a través de una pantalla sin que apenas uno interactúe con el empleado del local. Podemos tener nuestra comida favorita, en un intervalo de 20 minutos, en casa, con tan solo pulsar en la pantalla de nuestro móvil personal. O hacer un pedido a través la pantalla de tu smartphone, y pasar por el restaurante a recogerlo en los siguientes 15 minutos.
Tenemos a nuestra disposición todo tipo de ingredientes y productos, orgánicos, sin gluten, vegetarianos, los más exóticos, los más saludables, que incluso algunos parecen que han estado toda la vida formando parte de la gastronomía nacional.
Taco Bell ofrece comida de inspiración mejicana al estilo californiano en un formato de fast food, que hace años era algo impensable, y que ahora, se ha convertido en una marca y en una forma de comer que ya es parte de la vida cotidiana de los españoles.
Se está produciendo un enorme crecimiento en el sector, pero transformándose en su estructura, abandonando la restauración atomizada e independiente y acogiendo una organizada; y esto implica que la competencia sea mayor, y que la innovación sea uno de las armas fuertes para hacerse un lugar en el mercado. Esto conlleva que el sector sea más dinámico si cabe y que seguiremos con el pie en el acelerador, sabiendo que la evolución en los próximos años será espectacular.