A las puertas de Millésime con el reciente buen sabor del primer Millésime Weekend

Tal ha sido ese éxito, que ya podemos confirmar que, al menos, la cita volverá a repetirse el próximo año. Y es que el cónclave valenciano fue el lugar escogido por el experimentado equipo de Millésime para celebrar este gran montaje gastro-enológico, abierto al público por primera vez, pensado para ofrecer la posibilidad de conocer y probar, a precios asequibles, las elaboraciones de algunos de los profesionales más destacados de nuestra cocina, al tiempo que poder degustar vinos por copas de importantes bodegas españolas llegadas de las más variadas regiones y denominaciones de origen. Todo ello en Feria Valencia, en un único espacio de unos 12.000 metros cuadrados, planteado en ocho calles. En ellas, las bodegas y los diferentes wine bar participantes se alternaban con restaurantes (un total de 32, casi todos Estrellas Michelin y Soles Repsol), y productos gourmet, barras de cervezas, refrescos y aguas; a lo que se sumó la Plaza del café y dulces, un Aula-taller show cooking; la zona lounge; y una terraza Drink&Music con destilados, cócteles, champagnes…
Durante los cuatro días que ha durado esta primera edición, Feria Valencia ha sido punto de encuentro en la ciudad con una estupenda acogida por parte del público que ha participado de los diferentes momentos que ha ofrecido Millésime Weekend. Las jornadas estaban divididas en mañana y tarde-noche, con lo que, en función de la hora elegida, los asistentes han encontrado una alternativa diferente, y un perfil de visitantes que también ha variado en función de la hora, lo que permitió dar cabida a toda clase de público. Unos y otros atraídos por un interesante plan ‘gustativo’ que les ha ofrecido, a precios más populares de lo habitual, la posibilidad de probar y conocer grandes vinos y cocinas de nuestro país en una intensa ruta por la que han recorrido, sin moverse del sitio, toda nuestra geografía vinícola y culinaria. Y para desconectar, copas preparadas por barmans profesionales al final de cada jornada. Sin duda, una exitosa idea exportable a cualquier ciudad del país, aunque ahora, en breve, regresa a Madrid en su formato habitual, mediante invitación y enfocado a un público profesional.