A cargo de los fogones de Instinto Básico se encuentran los hermanos Fabián y Gustavo García Manca, cocineros argentinos, recién llegados de Nueva York. La cocina se enfoca a productos básicos, al respeto por la materia prima y a las elaboraciones en una espectacular parrilla. Los platos se asocian al entorno rústico del enclave y a la estación y se maridan con los aceites Valderrama que mejor los potencian.
El restaurante tiene capacidad para unos cuarenta comensales y además juega un papel muy importante dentro de la organización Valderrama, ya que permite hacer experimentos de maridaje de distintos aceites monovarietales con diferentes alimentos.