El sushi viaja bien, la carne en salsa también… No hay limitaciones en este sentido”, explica Miguel Ángel Antón, director general de la compañía cuando se le pregunta por las dificultades logísticas del transporte en el caso de la cocina oriental. Destaca igualmente la fuerte demanda existente en Madrid para estas especialidades: “la gente pide mucho este tipo de platos, que suelen ser los que no sabe cocinar”.
Cualquier cliente que llame a Baguise o haga un pedido por su página web – una posibilidad incorporada en los últimos meses- , podrá disfrutar en su casa de las elaboraciones de restaurantes de comida oriental como Nipon, El Pato Laqueado, Krachai, Royal Fénix, Tao o Tsunami, entre otros. Este último, trabaja con varias empresas de delivery, aunque no es lo habitual ni lo que se pretende, señala Antón: “Intentamos tener exclusividad”.
Algunos restaurantes han sido incorporados al catálogo general de Baguise en los últimos meses, junto a otros, como Lardhy, Casa Hortensia o Gumbo, que despachan otros tipos de comida. Los cambios han llegado de un año a esta parte coincidiendo con el momento en que Miguel Ángel Antón se convirtió en accionista mayoritario y optó por dar un vuelco a Baguise, comenzando por el producto: “Hemos prescindido de algunos restaurantes que no tenían éxito o no cuadraban en los niveles de servicio que esperábamos, mientras que hemos incorporado otros porque pensábamos que faltaba oferta de algún tipo de comida concreta”. Y es que Baguise apuesta siempre por la variedad, tanto en lo gastronómico como en los precios. “Intentamos que haya un poco de todo”, explica el director. “Se puede comer por diez euros o por cuarenta por persona”. Los asiáticos, aclara, se sitúan en un rango de precios un poco superior a la media.
Menú del día
Y dentro de esa línea de buscar variedad, Baguise se halla inmersa en el lanzamiento de un menú del día por 10,90 euros, con tres alternativas de primeros, otras tantas de segundos así como de postre. Aparte, cada día se puede elegir también entre ocho ensaladas para los primeros y pollo asado o escalope, en los segundos. La firma de restauración Riofrío lo elabora para Baguise, en virtud de un acuerdo recientemente suscrito por ambas.
Y ahí no ha quedan los cambios introducidos por Miguel Ángel Antón. Con él ha llegado la renovación de prácticamente toda la plantilla, que en la actualidad está compuesta por una veintena de personas -. Antón y su equipo, además han incorporado un sistema de tracking para saber dónde están en cada momento los repartidores, nuevos envases, controles de calidad, etc… Lo que no ha variado es el sistema de relación con los restaurantes: la compañía llega a un acuerdo con ellos para el cobro de un canon de publicidad mensual, y el establecimiento en cuestión les propone platos de su carta con descuento. En esa rebaja radica el margen de Baguise, realmente, aunque al cliente final se le cobra también una pequeña cantidad por el porte.
Como medio de información y promoción, esta empresa especializada en delivery edita un catálogo de platos que varía cada seis meses, y además, realiza mucho marketing online, según Antón. La mayoría de los clientes que realizan pedidos son particulares – un 80% – y un 20%, empresas, produciéndose los picos de consumo los fines de semana.
Antón, que procede del mundo de la gestión empresarial, afirma que en 2010 Baguise facturará un millón de euros, es decir, un 150% más que el año anterior. “Estamos creciendo, así que no nos podemos quejar”, dice cuando se le menciona la palabra de moda: crisis. Este último mes se han expedido, 1.500 tickets, lo que se traduce en unas 5.000 comidas. Y el pedido medio, cabe señalar, se ha mantenido en los mismos términos durante los últimos años en torno a los cincuenta euros, pese a la nada boyante coyuntura económica. JE.G.
