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Banespyme, una propuesta tecnológica para mejorar la gestión de los restaurantes

Para modernizar la gestión de los restaurantes, los socios de Banespyme Espacio Práctico se han apoyado en ICG Software, una compañía ilerdense que ofrece soluciones informáticas para hostelería, comercio, industria y distribución. ICG ha modernizado toda la gestión del restaurante O’Cruceiro, ubicado en Madrid.

Este establecimiento, de trescientos metros cuadrados, dos salones independientes y diez empleados, y que sirve dos mil cubiertos anuales, ha conseguido tras un año de informatización, gracias dispositivos portátiles con conexión inalámbrica, Pda’s (que sustituye a las comandas manuales del empleado de sala), y un software de gestión, reducir costes y aumentar la productividad y competitividad del restaurante.

Francisco Rodríguez, gerente del restaurante O’Cruceiro, explica los parabienes que la informática les ha traído en el día a día. “Además de disminuir el tiempo en la ejecución de las tareas, hemos eliminado completamente los posibles errores en los pedidos al obtener un mayor control en todas las entradas y salidas de las mercancías. A medio y largo plazo hemos observado también una disminución de las tareas manuales, un control del escandallo y un incremento en la ocupación de las mesas al poder atender en menos tiempo y con un mejor servicio a más clientes. El consumo en mesa ha crecido un diez por ciento y ahora tenemos con información en tiempo real sobre los pedidos, el stock, el almacenaje todo lo concerniente a la administración del negocio”.

En lo relativo al ahorro de costes, Francisco Rodríguez asegura que antes de la informatización del restaurante, supervisar el volumen de negocio costaba mucho trabajo. “Se tomaba cada pedido en tres notas; una para el camarero, otra para la cocina y otra para la caja. Un error, por ejemplo en la cuenta de un kilo de percebes, suponía una pérdida de trescientos euros. Ahora, el camarero, mediante un ordenador de mano o un PC, toma nota y ésta va directamente a la cocina donde se imprime para que los cocineros elaboren los platos. No hay errores y se atienden más mesas en menos tiempo, lo que conlleva también una reducción en los tiempos administrativos y de contabilidad”.

El gerente de O’Cruceiro se habla también de la adaptación del personal a las nuevas tecnologías: “Ha sido necesario formales en el nuevo sistema cuando ya estaban acostumbrados al viejo. De todas formas el esfuerzo inicial ha sido mínimo en comparación con las ventajas obtenidas: la posibilidad de error es nula y la contabilidad y la gestión del negocio es mucho más sencilla”, recalca. Francisco Rodríguez asegura que incorporar nuevas tecnologías en un restaurante supone una inversión mínima en comparación con sus ventajas. “Un pequeño restaurante puede instalar una solución de gestión desde tres mil euros y el retorno de inversión está entre los seis y doce meses”.

Una solución para cada negocio
Banespyme Espacio Práctico esta realizando jornadas de negocio, en las que explica las bondades de las nuevas tecnologías, por toda la geografía nacional. Según Ángel Madrona, director de ICG, son muchas las empresas de restauración interesadas en conocer las nuevas soluciones informáticas y muchas también, la que ya aplican las soluciones de ICG, ya sean cadenas, independientes, bares o discotecas. “Nuestra oferta es muy amplia, primando sobre todo la facilidad de uso, y sirve tanto para establecimientos pequeños, con un único terminal, como para un establecimiento que precise varios terminales, puntos de venta, impresoras de pedidos e cocina o, incluso, terminales de mano inalámbricas”, resalta Madrona.

Según Madrona las soluciones tecnológicas que aporta Banespyme valen tanto para un solo restaurante como para una cadena. “Las soluciones punto de venta ICG, a través de un sistema de comunicaciones, envían las ventas, cierres de caja y el resto de movimientos a una gestión centralizada (ICGManager). Las comunicaciones se producen en tiempo real a través de ADSL. ICG contempla todas las necesidades de una cadena de establecimientos propios y/o franquiciados, como el mantenimiento de productos y precios, compra centralizada o descentralizada, gestión de una cocina central, fabricación, trazabilidad, conciliación bancaria, contabilidad multiempresa, etc.”, explica.

Implantar una solución tecnológica básica global en un restaurante arranca en tres mil euros. “A partir de ahí depende de las necesidades del restaurante en cuestión, así como de su volumen de negocio u otros factores. De todas formas, el retorno de la inversión se lleva a cabo a partir de los primeros cinco o seis meses de la implantación tecnológica”, comenta el director de ICG.

Las ayudas y las subvenciones se pueden consultar a través de la página www.empresas.microsoft.com. “Por otra parte, el préstamo tecnológico Banespyme, acordado con el Ministerio de Industria y Banesto, pretende acabar con las barreras económicas de las empresas al incorporar nuevas tecnologías ,cubriendo un cien por cien de la inversión al cero por ciento de interés”, añade Ángel Madrona.

En lo tocante a la compatibilidad de los equipos y la vigencia de las soluciones informáticas, el director de ICG es concluyente: “Los programas de software de gestión de ICG Software para restaurantes son perfectamente compatibles e integrables en cualquier equipo. En cuanto a los programas, el usuario puede acceder a las actualizaciones de nuestro software de forma on line. Estas actualizaciones son efectivas cada seis meses y ofrecen nuevas funcionalidades y mejoras al software contratado por el restaurante”.l

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