La bodega Codorníu, la más antigua de España, ha lanzado de la mano de su embajador, el chef Jordi Cruz, el primer vino de su historia, Viñas de Anna (D.O. Catalunya).
Se trata de un blanco de gama Premium con el que la histórica bodega rompe con la tradición y por primera vez en su larga trayectoria elabora un vino de sus propias viñas, en homenaje a uno de sus iconos y emblemas: Anna de Codorníu.
Elegante, fresco y con marcada personalidad femenina, este Chardonnay elaborado con uvas procedentes de distintas parcelas propias, permite obtener un vino de cualidades excepcionales manteniendo intacta la expresión de la fruta.
De aspecto brillante, sus aromas a fruta blanca como la manzana o el melón dejan entrever también notas más cítricas con un fondo de especias dulces. En boca es fresco y voluminoso, con un final largo y agradable, un complemento perfecto para platos de carne blanca, pescados, mariscos, arroces y pastas.
El vino se lanza en dos versiones: una para el canal distribución y otra, el Blanc de Blancs, con una cupada diferente que le aporta matices distintivos, para el canal Horeca. Los reconocimientos al nuevo caldo no se han hecho esperar, ya que es este mes el jurado del certamen internacional Mundus Vini 2015, ha reconocido con una Medalla de Plata a Viñas de Anna.
«Este lanzamiento es un paso más en el objetivo estratégico del grupo de dar a los consumidores de Codorníu nuevos productos para distintos momentos de consumo”, comenta Javier Pagés, CEO del Grupo Codorníu. “Reforzamos así nuestra buena tendencia de crecimiento en vinos D.O. y consolidamos nuestro liderazgo en vinos y cavas de calidad». En su último ejercicio, la compañía creció crecía un 9,5% en vinos con D.O. y desde 2008 ha conseguido crecer en el negocio del vino un 66%, representando actualmente el 43% de sus ventas.
