PizzaShop aterriza en España y trae consigo el concepto de pizzería ‘take & bake‘, un modelo de negocio basado en la elaboración de un producto artesanal hecho al instante combinado con la posibilidad de que se hornee al momento o poder llevar y hornear en la comodidad de la casa.
La clave de su oferta de valor es la calidad del producto artesanal. La masa se realiza todos los días fresca, de forma que los clientes pueden disfrutar del sabor y aroma que desprende un proceso de fermentación tradicional. Además, PizzaShop permite al cliente condimentar a su gusto el producto. Por su parte, la compañía abarca las necesidades de todo tipo de usuarios, ofreciendo productos sin gluten o sin lactosa.
En su llegada a España, PizzaShop se ha puesto en manos del equipo de expansión y desarrollo de T4 Franquicias, con el objetivo de ampliar su red de establecimientos y cumplir sus objetivos de crecimiento. La consultora, líder en el sector de las franquicias, potenciará su crecimiento en el mercado nacional.
PizzaShop se ubica en locales de unos 70 metros cuadrados, y no necesita extracción de humos. La firma garantiza, por su parte, que en tan solo 6 semanas el franquiciado podrá disponer de su propio PizzaShop. Sus métodos de trabajo están diseñados para tener un equipo pequeño de trabajo que se encargue tanto de la fabricación de la masa casera como de atender a los clientes, con un promedio de dos empleados por turno.
Sus precios rondan los 6 euros de media por pizza, con lo que resultan muy tentadores para atraer una alta demanda de clientes. Para ello, PizzaShop presenta un diseño a partir del cual su plantilla puede asumir la demanda sin dificultades, ya que está dimensionado para que cada empleado pueda satisfacer las necesidades de los clientes de forma totalmente eficaz.
