Así lo ha explicado a Restauración News Isabel López, directora y propietaria de este mercado. Según sus cálculos, el primer paso de ese reto llegará en la primavera del año próximo, cuando el madrileño Paseo de la Habana acoja, en su número 24, un nuevo espacio que también llevará el nombre de Isabela, aunque los contenidos de su interior nada tendrán que ver con el gourmet market.
“Abriremos un nuevo y exclusivo espacio de complementos, accesorios y moda, de hombre, mujer y niños, que también se llamará Isabela”, explica Isabel López, quién puntualiza a esta revista que ese local, de 1.000 metros cuadrados, contará con 30 puestos de venta, tipo córners.
Una vez abierto ese espacio, los dueños de Isabela darán un paso más en su empeño por crear marca tratando de llevar el concepto del espacio gastronómico, abierto hace algo más de dos meses, también en el Paseo de la Habana, en su número 3, a otras ciudades europeas.
“Nuestra intención es replicar el modelo y llevarlo a ciudades como París o Londres con el mismo nombre. Hemos tratado de que Isabela sea un referente para llevarlo fuera y, de momento, lo es”, asegura López.
Terraza con simuladores
Precisamente para que lo siga siendo, los dueños de Isabela han querido dar a su mercado el valor añadido que le aporta la terraza de 300 metros cuadrados y que cuenta con el equipamiento necesario para que su uso sea posible en invierno y verano.
Una cualidad a la que la directora de Isabela suma la que, en su opinión, es la “gran novedad” de esta terraza. Y no es otra cosa que dos máquinas simuladoras –una de caza y otra de golf- a las que, previo pago, podrán acceder sus clientes. Sin contar con esos simuladores, Isabel López asegura que la puesta en marcha de esa terraza ha supuesto una inversión de más de 300.000 euros.
Cantidad adicional a los 31 millones de euros que Pahabana desembolsó para costear las obras de reforma del edificio (ejecutadas entre octubre de 2011 y abril de 2012 por Requena y Plaza Arquitectos y por Carrera Estudio) y para comprar el edificio en sí.
Una compra que data de febrero de 2003, cuando ese espacio estaba ocupado por la Calle 54 de Fernando Trueba. De ahí que la planta sótano de Isabela cuente con una sala de cine, con capacidad para 50 personas, que se utilizará para hacer presentaciones de productos o catas, que irá unida a una sala de eventos de aproximadamente 200 metros cuadrados que estará operativa antes de final de año.
Antes de que arranque el que viene también estará funcionando el restaurante que regentará Joaquín Felipe, chef del Hotel Urban, en la planta alta del mercado. La cocina y el negocio de dicho restaurante serán absolutamente independientes de los 38 puestos de comida y bebida que ocupan las otras dos plantas del mercado. JG.B.
