Hace unos meses se inauguraba en Valladolid el restaurante Corinto by Elías Murciano, la nueva a puesta de este chef llegado de Venezuela cuya nueva cocina internacional, que lleva dos años practicando al frente de Citra, le ha valido su consagración definitiva dentro del panorama gastronómico madrileño. La nueva apertura responde no sólo a unos planes de expansión o crecimiento, sino también a una forma de pensar.
“Corinto nació a raíz de una idea entre amigos; comenzó siendo un asesoramiento hasta que nos mojamos más. Para este restaurante el listón está alto, puesto que, obviamente, ser nombrado Citra por el New York Times como el mejor restaurante nuevo abierto en Madrid es importante. Pero hay que tener en cuenta que España es muy rica a nivel de gastronomía y los vallisoletanos son muy agradecidos, y hay grandes planes para la restauración allí”.
Competir con amigos
Tras dos años al frente de Citra, el local que le ha servido para dar su particular salto a la fama, Elías Murciano reconoce que todavía espera mucho más de este estableciemiento ya que “tiene una participación activa en lo que es la gastronomía madrileña”, por la que no sólo aboga él, sino otra multitud de jóvenes compañeros que, hoy por hoy, son los principales valedores de la gastronomía de la capital ante el mundo.
“Somos los divertidos, jóvenes, nuevos, que estamos tratando de hacer una nueva cocina un poco a base de amistades entre nosotros. Esta misma línea la llevamos Alberto Chicote, Darío Barrio, José Luis Esteban, Pedro Olmedo… hay una camarilla y para mí es importante: pertenezco a esto, somos todos amigos, todos confiamos en todos, y estamos tratando de hacerlo lo mejor posible. Las polémicas no traen nada bueno. La competitividad es buena, pero siempre y cuando se tenga presente que el contrincante en este caso es un amigo y que vamos hacia un bien común: elevar el nivel de la restauración en Madrid”, asevera el chef.
En el caso de Elías Murciano, ese elevar el nivel ya ha trascendido de las fronteras de la capital. Primero Corinto, pero vendrán más, ya que está previsto que el próximo 21 de junio se haga realidad un nuevo proyecto dentro de la bodega Cepa 21.
“Va a ser un restaurante muy exclusivo, en un entorno muy especial ,con capacidad para 48 comensales, a tres kilómetros de Peñafiel en las Bodegas de Cepa 21. Es otra manera de entender que con mi llegada a España, lo que he querido es hacer bien las cosas. Poder aprovechar las oportunidades: y esto es una oportunidad, como también lo es Corinto”.
El futuro
Tanto Corinto, como el nuevo local en Cepa 21, son pasos que conducen hacia el futuro de este chef, que no oculta que proyecta al menos un par de aperturas fuera de España. Aún así, dentro de muchos años, los fogones podrían no formar parte de la vida de Murciano.
“Me gustaría expandirme a nivel mundial, en varios puntos cardinales como Nueva York, Miami y, si Venezuela va bien, pues me gustaría ir allí para asesorar y manejar este estilo de cocina. No pretendo estar en los fogones a los 75 años. Y no es porque no me guste, sino porque todo tiene un peso en la vida, y pretendo tener hijos, tener nietos, y disfrutar de ellos”, dice Elías Murciano. l
Ana I. García
El truco
“Cuando limpias unas alcachofas, añade perejil, en vez de limón, porque la clorofila del perejil hace que la alcachofa no se oxide”.
El perfil
• Sus abuelos eran propietarios de restaurantes en Francia. Elías descubrió que le encantaba la cocina después de haber estudiado derecho.
• Si no hubiera sido chef, hubiera sido diseñador gráfico o de motores.
• En 1996 cursa estudios en Miami, en la sede de la American Culinary Institute of América, donde permanece dos años y medio. Llega a España en 1998 y en 2000 se produce su estancia en Lasarte, Guipúzcoa, con Martín Berasategui.
• Un año después se traslada a Plaza Athenee de Paris, donde cocina a cargo de Alain Ducasse.
• En 2002 vuelve a España, En 2004, abre su primer restaurante en Madrid, Moskada (ya no está en funcionamiento). En 2005 inaugura Citra y en menos de un año The New York Times le concede el título de “Restaurante Nuevo Favorito de Madrid”.
• Le hubiese gustado darle de comer a Frank Sinatra, y le encantaría dar de comer a Woody Allen.
