El regreso a las cervezas con amigos y a disfrutar de unas buenas raciones está asegurado gracias a La Antigua Bar 1913, tu nuevo bar de toda la vida.
El final de las vacaciones se acerca y poco a poco la ciudad de Madrid va recuperando su energía y ajetreo habitual. Las calles de la capital se convierten en el lugar de los siempre ansiados reencuentros y La Antigua 1913 se presenta como el bar idóneo para celebrar estas reuniones, siempre acompañados de unas cervezas bien tiradas y una oferta gastronómica de calidad.
Un bar de barrio con historia
La historia de La Antigua Bar comienza en 1913, cuando el bisabuelo de Julio Quiroga fundó el primer local de este bar de barrio en el puente de Ventas. Con el tiempo, lo que en su origen era una churrería-cafetín ha ido evolucionando al igual que lo hizo la oferta gastronómica de la capital: renovando lo tradicional.
Ahora, La Antigua Bar 1913 es el sitio ideal donde quedar con tus amigos y familiares para picar algo, desde unas ricas patatas fritas en el momento, hasta una ensaladilla de las de siempre, una tortilla recién hecha o un buen bocadillo de calamares, entre otros muchos más platos de nuestra gastronomía más tradicional.
La Antigua 1913, buena opción para la vuelta a la rutina
En estos días de vuelta a la normalidad, de tardes largas y noches aún sin chaqueta, no cabe duda de que el punto de encuentro perfecto para volver a disfrutar de la capital y despedirse bien de la temporada estival es La Antigua, un bar que nació hace 100 años.
Así, los madrileños podrán elegir cualquiera de los tres restaurantes de La Antigua Bar 1913 que hay en Madrid (Andes, Valdebebas y Quevedo) para sobrellevar esta vuelta a la rutina en su nuevo bar de toda la vida, pero mejor que nunca.
