El nuevo grupo empresarial LEW Brand se convierte en la marca paraguas que dará soporte a las cadenas de restauración Brasayleña, La Burratina y Pollo Criollo, así como a otras marcas en las que la compañía ya tiene planes de desarrollo muy avanzados.
“A través de LEW Brand, vamos a generar múltiples sinergias que permitirán dar un importante salto tanto cualitativo como cuantitativo a nuestro proyecto empresarial” ha manifestado Pedro López Mena, CEO del grupo y fundador de la cadena Brasayleña.
LEW Brand nace con la potencia de sus 25 restaurantes Brasayleña, un restaurante La Burratina, trattoría pizzería 100% inspirada en la cocina napolitana, y su marca más joven, Pollo Criollo, que entró en funcionamiento a través de dark kitchens hace escasamente un año, y ya cuenta con 20 puntos de venta a nivel nacional a través de agregadores.
LEW Brand está inmerso en el desarrollo de nuevas marcas
Pollo Criollo ofrece múltiples oportunidades cruzadas con Brasayleña al tratarse de un concepto de cocina internacional tematizada y especializada en pollo a la brasa, que se complementa con una amplia oferta de productos venezolanos.
Desde que arrancó este proyecto de delivery en el verano del 2021, ha duplicado su facturación en este canal y ya ha superado las cifras de ventas previas a la pandemia. Según López Mera, “para 2022 el objetivo es superar la facturación de 24 M€, un 30% más que la alcanzada durante 2021”.
Su equipo de I+D está inmerso en el desarrollo de nuevas marcas centradas en un tipo de cocina internacional y de gran demanda por el consumidor español. También continúan desarrollando Brasayleña, fuertemente implantado en Madrid desde hace 15 años y con presencia en Barcelona, La Coruña, Pontevedra, Murcia y Sevilla.
Un equipo de 700 empleados cada vez más experto en nuevas tecnologías
LEW Brand cuenta con una plantilla cercana a los 700 empleados, con un equipo cada vez más experto en las nuevas tecnologías y en el uso de las dark kitchens. “Nos será más sencillo llevar nuestros productos a aquellas zonas en las que hasta por el momento no tenemos restaurantes, o donde, por motivos de distancia no podemos garantizar un adecuado traslado de los productos, mejorando además la rentabilidad de nuestra cadena”, añade López Mena.
Desde su fundación en 2008, ha invertido en sus restaurantes más de 25 millones de euros y es propietaria del 85% de los restaurantes que operan bajo su marca. Tras casi 15 años de experiencia en el mercado, y de aperturas de restaurantes propios y franquiciados, 2021 ha sido el año de su revolución 3.0.
El nuevo LEW Brand ha profundizado además en la digitalización de todos sus procesos, introduciendo nuevos sistemas de control que le llevan a ahorrar muchas horas al mes, con el consiguiente ahorro económico y el objetivo de continuar creciendo en número de marcas y clientes.