Según el documento, los restaurantes de alta gama –con un coste de mínimo 50 euros por comensal- ya sólo son frecuentados en un 3%, aunque sus ventas aún suponen el 24% del total.
Y es que desde la llegada de conceptos como los de Cojean o Exki, los comensales se inclinan por la ecuación precio-producto-tiempo, valorando cada vez más el tiempo que tardan en comer. La media en Francia es de 30 minutos cada día.