Según manifestó el editor de la revista, James Ogilvy, “crear establecimientos que duren y duren ha de ser la meta del restaurador. Pocos los consiguen, pero, mediante una visión clara, combinada con una gran pasión por la comida y un fuerte sentido del diseño, Terence Conran, que abrió su primer local hace 53 años, lleva mucho tiempo lográndolo. A diferencia de otros, que vienen y van, los restaurantes de Conran, una vez que abren, permanecen abiertos”.
El reconocimiento a la trayectoria de Terence Conran llega en un momento en el que la restauración comercial británica empieza a abandonar la tradicional imagen que la liga a los fish & chips, para convertirse en la meca del gourmet, donde la pasión por la comida, la atención al cliente y el diseño, ganan más y más importancia, impulsados por el propio Conran y otros nombres tales como Gordom Ramsey o Alan Yau y Christian Liagre (Nobu). l RN
