Con una carta de media docena de primeros y otra de segundos, a elegir, para un ticket de 75 euros, vinos y café incluido, una vez más la experiencia de Prats Fatjó se pone al servicio de un importante reto: servir a un público como el de un trofeo de tenis, desde una cocina móvil y en una carpa que aloja la sala-restaurante.
Pero a Marc Torres no le asusta dar un promedio diario de 700-800 servicios. Ayer tuvo como comensales singulares a sus colegas: Joan y Jordi Roca, Nandu Jubany, Carlos Gaig y Sergio y Javier Torres.