Istanbul Döner Kebap comenzó su andadura en España en 1999 en el barrio madrileño de Lavapiés. Su concepto basado en la cocina turca tuvo tanto éxito que apenas cuatro años más tarde, en 2003, se ponía en marcha el sistema de franquicia. A día de hoy, los resultados y hablan por sí solos: la firma cuenta con unos sesenta locales operativos y al final del ejercicio pasado los establecimientos propios habían alcanzado una facturación de 19,2 millones de euros o, lo que es lo mismo, el año pasado se superó la barrera de los cinco millones de kebaps consumidos en los restaurantes de la marca.
Aparte, tras una andadura de diez años, la compañía apostó por crear su propia fábrica en Casarrubios del Monte (Toledo) en la que se producen actualmente el 100% de los productos cárnicos (tanto de pollo como de ternera) que se ofrecen en sus locales; así como por implementar campañas como “Garantía”, que aseguran al cliente la calidad total del proceso productivo mediante un control global de todas sus fases.
Un cumpleaños especial
Pero los procesos y mejoras de Istanbul Döner Kebap no sólo han ido dirigidos al cliente y a incrementar la calidad del producto final que éstos van a consumir, sino que la firma va a celebrar su cumpleaños habiendo adoptado una serie de medidas tanto en cuestiones de imagen como en otras destinadas a paliar los posibles efectos de la crisis ante sus franquiciados o potenciales franquiciados.
Dentro de la primera rama, la empresa decidió renovar el diseño de sus locales, dándoles un toque de modernidad a fin de diferenciarse de la competencia cada vez más pujante. La nueva decoración está basada en elementos que evocan su país de origen, Turquía, con imágenes de gran tamaño en paredes y paneles distribuidores, así como las tradicionales especias. Además, se ha realizado un importante esfuerzo en habilitar zonas más agradables y cómodas para los clientes de cada local con mobiliario totalmente nuevo.
Pero no sólo se ha tratado acerca de cuestiones de imagen, sino que la compañía ha sido consciente de la realidad económica actual y ha puesto en marcha una campaña de apoyo financiero a sus franquiciados, a través de la cuál la central actúa como aval en la financiación que éstos requieran. Por otra parte, el ejercicio 2008 se caracterizó por ser un año en el que la empresa reubicaba locales que no estaban obteniendo los resultados previstos, en otros emplazamientos más valiosos, estratégicamente hablando, ya que la nueva coyuntura inmobiliaria lo hacía posible.
Con estas medidas se ha logrado mantener la tendencia de los franquiciados de Istanbul Döner Kebap a convertirse en multifranquiciados que gestionan dos ó más locales.
El modelo de expansión
Istambul Döner Kebap lleva a cabo su modelo de expansión mediante la apertura de locales propios (aproximadamente un tercio del total) y franquiciados y el objetivo principal para este ejercicio es el de inaugurar entre seis y diez establecimientos, hasta alcanzar los 70 restaurantes operativos y tener presencia en la práctica totalidad de ciudades para consolidar la marca en el territorio nacional. Y en breve también se gestionará la entrada en el mercado luso. l RN
