Así, por ejemplo, se ha abogado por esta regularización desde el Sindicato Nacional de Hoteleros, Restauradores y Cafeteros (SYNHORCAT), en lugar de evaluarse caso por caso como defiende el Ejecutivo de Sarkozy. La propuesta de SYNHORCAT pugna por realizar de una vez la regularización de todos los trabajadores que fueron contratados antes de julio de 2007 con transparencia y para los que sus patronos pagan las cargas sociales al tiempo que ellos mismos cotizan.
Según han manifestado desde esta patronal, en Francia hay actualmente unos 50.000 trabajadores irregulares en el sector que deberían ser inmediatamente regularizados. Además, cada año se quedan sin cubrir hasta 20.000 puestos de trabajo en la hostelería gala por falta de candidatos.
Los llamamientos de los responsables empresariales se producen en un contexto marcado por la huelga de medio millar de trabajadores indocumentados en la región de París, apoyados en particular por el sindicato Confederación General del Trabajo (CGT) y la asociación Droits Devant. l RN
