Ahora el chef, que hasta enero se ha tomado un descanso, declara: «Hay un 90% de posibilidades de que cree mi propio proyecto». Según ha manifestado, con el nuevo año comenzará a barajar posibilidades con la mente abierta y la intención de dar que hablar antes de este verano. «Es muy probable que emprenda el proyecto en Gijón, pero no descarto ni Madrid, ni Barcelona, ni Japón,…», dice entre bromas y veras. En todo caso, sí tiene claro que volver a Paladares, el restaurante con el que entró por la puerta grande en el mundo de la alta gastronomía, significaría un retroceso. «Haga lo que haga, sí quiero mantener la filosofía de estos últimos tres años, hacer un restaurante de calidad en el que la gastronomía sea algo más que comida; una forma de sorprender al comensal y de entretenimiento».
El cierre de Gallery, comenzó a fraguarse el pasado mes de septiembre, tras la adquisición de MBA por el fondo de inversión N+1 (con participación en la cadena hotelera High Tech). Gallery fue concebido en 2005 no sólo como restaurante, sino como una inversión en publicidad y marketing para el grupo, pero ahora N+1, acuciado por la situación económica actual, ha decidido suprimir esta partida y centrarse en su principal negocio: la distribución de material quirúrgico para traumatología y ortopedia.
