Para los más anclados en la tradición, la paella valenciana, el arroz a banda, el negro con sepia o el muy gallego a base de lubrigante y almejas son siempre fórmulas de éxito.
Para la temporada 2007, Roca abre su repertorio con el arroz marea baja en el que deja que campen a sus anchas las algas y lo que él denomina mariscos de marea (berberechos y almejas, principalmente). A éste le sigue el arroz corro de Brujas, en el que la variedad de grano Carnaroli comparte su presencia en la paellera con setas de primavera, (perretxikos, senderuelas y colmenillas). Uno de los más contundentes (también en precio) es el arroz negro sobre negro, a base de lamprea y trufa negra fresca, que tiene un rival igual de potente en el arroz manito, compuesto de fabas de lourenzá y manitas de cerdo enchiladas. Para los postres, Pedro Roca propone un gazpacho de chocolate blanco, helado de arroz y barquillo de limón.l A.B.