Con la monastrell como variedad principal, y autóctona, son otras tantas las uvas que admite el Consejo Regulador en la elaboración de los vinos de esta denominación. Combinadas, o como monovarietales, han sido 106 referencias las presentadas al Certamen, y sometidas a la cata ciega de catorce profesionales (entre catadores, críticos, responsables y directores de las más destacadas publicaciones), quienes, a partir de sus valoraciones y puntuaciones, han decidido los vinos ganadores de cada una de las diez categorías que componen el concurso. Durante dos jornadas de catas, las bodegas de Jumilla han mostrado un amplio abanico de productos, entre los que los tintos han vuelto a ser los vinos destacados, pues van ganando en calidad y complejidad con el paso de los años, algo que en esta edición han demostrado de manera significativa. Entre los ganadores, la medalla de oro en las distintas categorías han sido para: Jóvenes añada 2009-2010 sin madera: Sabatacha Syrah 2010; jóvenes con barrica 2009- 2010: Alceño Syrah 2009; jóvenes monastrell sin barrica 2009-2010: Castillo de Jumilla Monastrell 2010; en cuanto a la categoría jóvenes monastrell con barrica (09-10), el oro y la plata quedaron desiertos, por lo que el bronce fue para Divus 2009. En la categoría de los blancos, tampoco ha habido oro, con lo que la plata se la lleva Viña Honda Macabeo 2010; rosados: Hispalis 2010.
En los tintos con barrica 2008 y anteriores: Familia Paco Pacheco Selección 2008; tintos crianza: Luzón Crianza 2008; también entre los reserva y gran reserva el oro quedó desierto, por lo que la plata se entregó a Castillo de Jumilla Reserva 2005. Y en los dulces: Silvano García Monastrell 2008.
