Por un lado, la norma IFS es un sistema de seguridad alimentaria que supone cumplir con los parámetros de calidad fijados por las grandes empresas de distribución.
Por otro, la norma ISO 14001 especifica los requisitos para un sistema de gestión ambiental y su objetivo global es apoyar la protección ambiental y la prevención de la contaminación en equilibrio con las necesidades socioeconómicas.