El único subsegmento que registró resultados negativos fue el de las pizzerías, donde el negocio se redujo en aproximadamente un 5% en cuanto a facturación, mientras que el resto de segmentos experimentó crecimientos de entre el 3% y el 5%.
La oferta de hamburgueserías generó un negocio por valor de 1.300 millones de euros en 2010, manteniéndose como la rama de negocio de mayor crecimiento en términos de facturación, al aumentar cerca del 5%. El negocio de bocadillerías, por su parte, supuso 455 millones de euros, un 3,4% más que en 2009. El segmento de otros establecimientos generó un negocio de 315 millones de euros, un 3,3% más que en el ejercicio precedente.