La cadena de restauración Wok Street aterriza en Madrid con la apertura de un local en la calle Mayor 45, e introduce una nueva forma de entender la gastronomía asiática, inspirada en el concepto street food.
Su cocina en vivo, elaborada con ingredientes de primera calidad, transporta a través de sus sabores a las calles de Nueva York en los años 20. La personalización de los platos es una de sus señas de identidad, que propone a los comensales que diseñen su propio menú en función de sus preferencias.
Así permite escoger el tamaño y el tipo de base, a elegir entre fideos de arroz o trigo, arroz o verduras frescas; y ofrece de complemento más de 15 ingredientes, que incluyen carnes, pescados o verduras. Como aderezo pueden elegir salsas con un toque picante, como el chili dulce, especiales para los más atrevidos; o decantarse por opciones más clásicas y menos arriesgadas, entre las que encontramos teriyaki o yakisoba.
La carta incorpora además una amplia variedad de propuestas de la gastronomía japonesa, china y del sur de Asia como los ya clásicos makis o nigiris; las cada vez más demandadas samosas, que se presentan rellenas de pollo y curry; o las deliciosas empanadillas Kuo tie, preparadas con carne y verduras, así como los clásicos rollitos de primavera o su apartado de sopas ramen.
Una experiencia diferente que puede disfrutarse en el propio local, de estética industrial y con aire neoyorkino. Y también cabe la posibilidad de optar por el formato take away, al más puro estilo Street Food; o por el servicio a domicilio a través de plataformas Glovo, Deliveroo, Just Eat y Uber Eats.
Con la apertura de este primer restaurante en Madrid, el grupo dirigido por Lorenzo Ruiz de Alda pone en marcha un ambicioso plan de expansión que le permitirá seguir creciendo por toda la geografía española y duplicar su tamaño a lo largo de este año.
Wok Street cuenta con tres locales en Barcelona, en el Centro Comercial Diagonal Mar, en Sagrada Familia y en Mataró Parc, a los que se sumarán en 2019 la apertura de dos nuevos restaurantes en los aeropuertos del Prat de Barcelona y Alicante-Elche, además del que se acaba de inaugurar en Madrid.
La familia Ruiz de Alda fue responsable en los 80 del nacimiento del concepto de restauración en torno al bocadillo y a una marca, Bocatta, que aglutinó a 135 restaurantes distribuidos por toda España.
