World Central Kitchen (WCK), la ONG liderada por el chef español José Andrés, ha confirmado esta mañana que siete miembros de su equipo han sido asesinados en un ataque del Ejército de Israel en Gaza.
Según ha informado la ONG, que se dedica a proporcionar comida en lugares de conflicto: «Los integrantes del equipo de WCK viajaban por una zona desmilitarizada en dos vehículos blindados con el logo de WCK y un vehículo ligero».
«A pesar de coordinar los movimientos con el ejército israelí, el convoy fue alcanzado mientras salía del almacén de Deir al-Balah, donde el equipo había descargado más de 100 toneladas de ayuda humanitaria traída a Gaza por la vía marítima», confirma la nota enviada por la ONG.
Entre los fallecidos hay tres palestinos, un australiano, un polaco, un británico y un ciudadano con doble nacionalidad estadounidense y canadiense.
Erin Gore, directora ejecutiva de World Central Kitchen, ha declarado: «Este no es solo un ataque contra WCK, es un ataque contra organizaciones humanitarias que se presentan en las situaciones más desesperadas donde la comida se utiliza como arma de guerra. Esto es imperdonable».
La ONG ha decidido suspender sus operaciones en la región
Por su parte, el chef José Andrés ha publicado lo siguiente en la red social X: «Hoy, World Central Kitchen ha perdido a varios de nuestros hermanos y hermanas en un ataque aéreo de las Fuerzas de Defensa de Israel en Gaza. Estoy desconsolado y afligido por sus familias y amigos y por toda nuestra familia WCK. Estas son personas… ángeles… con los que serví en Ucrania, Gaza, Turquía, Marruecos, Bahamas, Indonesia. No son personas sin rostro… no son personas sin nombre«.
Además, el chef ha responsabilizado directamente a Israel de la muerte de sus compañeros: «El Gobierno israelí debe poner fin a esta matanza indiscriminada. Tiene que dejar de restringir la ayuda humanitaria, dejar de matar a civiles y cooperantes y dejar de utilizar los alimentos como arma. No más pérdidas de vidas inocentes. La paz comienza con nuestra humanidad compartida. Tiene que empezar ahora».
Tras el incidente, la ONG World Central Kitchen ha pausado inmediatamente sus operaciones de ayuda humanitaria en la región.
