El sector de la restauración colectiva indica que la propuesta del nuevo proyecto de ley del Real Decreto de Consumo para comedores provocará una subida del 25% en los menús.
La patronal, Food Service España, ha remitido sus alegaciones al Ministerio de Consumo, a quien ha trasladado que las medidas propuestas tendrán como consecuencia un importante encarecimiento de los precios y muy poca mejora a nivel nutricional.
En este sentido, María López, portavoz de Food Service España, ha declarado: «Muchas de las exigencias reflejadas, como la cuota 5% de producción ecológica o los productos de proximidad, no tienen ningún impacto nutricional, pero si un fuerte impacto económico».
Un proyecto que según la patronal no tendrá un gran impacto nutricional
A nivel nutricional, el nuevo Real Decreto eleva a rango legal las directrices de AESAN en materia de alimentación saludable y sostenible. Estas son pautas que el sector de la restauración colectiva ha estado aplicando en los últimos años. De hecho, hay que destacar que las empresas de Food Service España cuentan en más de 2.000 nutricionistas en plantilla que garantizan que esto se cumpla.
Así, se encargan de controlar la calidad de los menús semanales y asegurar el equilibrio y las condiciones nutricionales más adecuadas para cada colectivo. Además, también desempeñan funciones de compras y gestión de centros.
La patronal también ha hecho hincapié en que el tema de la obesidad infantil tiene un origen multicausal y complejo, y no se debe señalar la comida del comedor escolar como el único culpable.
Apostar por productos ecológicos y de proximidad repercutirá en el precio del menú
En el Real Decreto se han propuesto dos medidas basadas en los productos ecológicos y la proximidad, que, en opinión de Food Service España, «no tienen ningún impacto nutricional, pero sí un fuerte impacto económico».
Esto se debe a que los productos ecológicos son, por lo general más caros. Y no solo eso, sino que también su propia naturaleza (sin herbicidas, ni fertilizantes, picotazos…) es incompatible con la posibilidad de planificar un menú para la restauración colectiva.
Además, algunos productos ecológicos se tienen que importar, lo que hace que pierdan su consideración de ecológicos al incrementar las emisiones y los costes del transporte y energías consumidos.
Con respecto a los productos de cercanía y proximidad, desde la patronal defienden que la producción es limitada e insuficiente para las necesidades que demanda el sector, sobre todo en Madrid. Como consecuencia, una oferta limitada hace subir el precio.
Acerca de este asunto, María López también ha indicado: «La imposición de productos restringe la competencia, y crea auténticos lobbies de productores y distribuidores locales que, ante la obligación de comprarles a ellas para poder tener posibilidades de ser adjudicatorios de un contrato, van a fijar los precios de los productos».
Un contexto complicado para las empresas de restauración colectiva
Por último, para que la implantación de estas medidas sea sostenible, desde la federación consideran que dichas iniciativas deben asumir la situación económica actual del país. El impacto del Covid-19, el aumento de los costes por la electricidad y el encarecimiento de los productos están comprometiendo la continuidad del servicio de las empresas del sector.
Así, María López ha concluido: «Resulta fundamental que las instituciones públicas correspondientes revisen y adapten los precios de estos servicios, ya que la situación actual puede afectar a la continuidad de las empresas que prestan servicio en los comedores escolares, dejando a miles de niños sin la garantía de acceder – cada día – a una alimentación equilibrada y saludable».